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3 Juan
Cayo
1. En el Nuevo Testamento de la Biblia, Cayo se menciona en la tercera carta de Juan como destinatario de la carta. Tradicionalmente se cree que el autor de la carta es el apóstol Juan, y se dirige a Gayo con gran afecto y elogio.
2. La identidad específica de Cayo no está del todo clara, ya que hubo varios individuos llamados Cayo mencionados en el Nuevo Testamento. Sin embargo, según el contexto de la carta, es probable que fuera un miembro o líder destacado dentro de una comunidad cristiana local.
3. En 3 Juan, el apóstol Juan elogia a Gayo por su fidelidad y hospitalidad. Reconoce el compromiso de Gayo de caminar en la verdad y vivir según las enseñanzas de Jesucristo. John expresa alegría al escuchar informes sobre la fidelidad de Gayo y cómo ha estado apoyando y cuidando a sus compañeros creyentes que son misioneros viajeros.
4. El enfoque principal de la carta gira en torno a un contraste entre el ejemplo positivo de Cayo y el ejemplo negativo de una persona llamada Diótrefes. Parece que Diótrefes ocupaba una posición de liderazgo o influencia dentro de la misma comunidad cristiana que Cayo. Sin embargo, a diferencia de Cayo, Diótrefes actuaba de manera autoritaria y divisiva, negándose a recibir a los misioneros viajeros e incluso expulsando a aquellos que buscaban promover la unidad y la cooperación entre los creyentes.
5. En su carta, Juan anima a Gayo a seguir imitando el bien y a no desanimarse por las acciones negativas de Diótrefes. Afirma la hospitalidad de Gayo y lo anima a apoyar a los misioneros viajeros que están difundiendo el mensaje del Evangelio. Juan también promete abordar las acciones de Diótrefes cuando visite la comunidad.
6. La historia de Gayo en 3 Juan resalta la importancia de la hospitalidad, el amor y el apoyo dentro de la comunidad cristiana. Cayo sirve como ejemplo de alguien que demuestra una fe genuina y se preocupa por sus compañeros creyentes, mientras que Diótrefes representa las consecuencias negativas del orgullo y el egocentrismo.
7. L a carta de 3 Juan sirve como recordatorio a los creyentes para que imiten lo que es bueno, apoyen a quienes están difundiendo el Evangelio y rechacen el comportamiento divisivo y dañino. La historia de Cayo enfatiza la importancia de vivir la fe a través de actos de amor y hospitalidad hacia los demás.
