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Parte 20
Jesús Calmando la Tormenta
La historia de Jesús calmando la tormenta está registrada en los evangelios de Mateo (Mateo 8:23-27), Marcos (Marcos 4:35-41) y Lucas (Lucas 8:22-25). Relata un incidente en el que Jesús calma milagrosamente una tormenta furiosa mientras él y sus discípulos cruzan el Mar de Galilea.
Una tarde, Jesús y sus discípulos subieron a una barca para cruzar el mar. Mientras navegaban, Jesús se quedó dormido en la popa de la barca. De repente, se levantó una furiosa tormenta, con fuertes vientos y olas que comenzaron a llenar de agua la embarcación. Los discípulos, temiendo por sus vidas, despertaron a Jesús, exclamando: "¡Señor, sálvanos! ¡Estamos pereciendo!".
En respuesta a su súplica, Jesús se levantó tranquilamente, reprendió a los vientos y a las olas y dijo: "¡Paz, estad en silencio!" Al instante, la tormenta amainó y el mar quedó en completa calma. Entonces Jesús se volvió hacia sus discípulos y les preguntó: "¿Por qué tenéis miedo? ¿Todavía no tenéis fe?".
Los discípulos quedaron asombrados por lo que habían presenciado. Se maravillaban del poder de Jesús sobre la naturaleza y decían: "¿Quién es éste, que hasta el viento y el mar le obedecen?"
El significado de la historia de Jesús calmando la tormenta es profundo:
1. Autoridad sobre la creación: La historia revela la autoridad divina de Jesús sobre la creación. Al calmar la tormenta con una simple orden, Jesús demuestra su poder sobre las fuerzas de la naturaleza. Enfatiza su identidad como Hijo de Dios, que tiene control sobre todas las cosas.
2. Fe ante la adversidad: La historia destaca la importancia de la fe en circunstancias desafiantes. Mientras los discípulos estaban llenos de miedo y dudas, Jesús deseaba que tuvieran una confianza inquebrantable en él, incluso en medio de una situación que amenazaba sus vidas. Sirve como un recordatorio para tener fe ante la adversidad, sabiendo que Jesús tiene el poder de traer paz en cualquier tormenta que enfrentemos.
3. Revelación de la verdadera naturaleza de Jesús: El asombro de los discípulos y la pregunta: "¿Quién es éste?" revelar una comprensión más profunda de la identidad de Jesús. Comienzan a comprender que Jesús es más que un simple maestro o un profeta: es el divino Hijo de Dios con autoridad y poder más allá de la comprensión humana.
4. Significado de la paz: A través de su acción de calmar la tormenta, Jesús trae paz física a la situación caótica. Esto subraya su papel como Príncipe de Paz, que trae paz interior, tranquilidad y restauración a quienes confían en él.
5. Garantía de la presencia de Dios: La historia brinda la seguridad de que Jesús está presente con sus seguidores incluso en los tiempos más turbulentos. Así como estuvo físicamente presente en la barca con los discípulos, promete estar con los creyentes, guiándolos y protegiéndolos a través de las tormentas de la vida.
La historia de Jesús calmando la tormenta sirve como recordatorio de la autoridad de Jesús sobre la creación, la importancia de la fe en circunstancias difíciles y la seguridad de su presencia y paz en nuestras vidas. Alienta a los creyentes a depositar su confianza en Jesús, incluso cuando se enfrentan a desafíos abrumadores, y a encontrar consuelo y paz en su poder y amor inagotables.
